>

Juventud Misionera - JUMI


Era mediados del año 1976 cuando en la Parroquia San Francisco Solano sólo existía un Grupo llamado Juventud Franciscana, JUFRA. Unos meses después muchos de esos jóvenes que pertenecían a JUFRA decidieron no seguir más. Pero habían unos cuantos que querían seguir trabajando para los mas necesitados; es así que un 24 de Enero del año 1977, 13 jóvenes decidieron formar un nuevo grupo juvenil; donde se viviera la palabra de Dios y se tomara como ejemplo a Jesucristo joven.

Este grupo dio inició a sus labores dando clases vacacionales y posteriormente haciendo catequesis en el recientemente formado PPJJ Mariscal Castilla. Y para cubrir los pequeños gastos que esta actividad generaba realizó una rifa. Luego organizó Campeonatos de Basket Ball con los cuales no solo generaba ingresos sino también ganaba integrantes para el grupo. A la par de todas estas actividades, cantábamos todos los domingos en la misa de 7pm.

Posteriormente, cuando la Parroquia quiso aprovechar el espacio que había al costado de la Sacristía, pidió nuestra ayuda para construir lo que es hoy la Canchita Deportiva Parroquial; y es entonces que se organizó una fiesta para recaudar fondos. Los resultados de dicha fiesta fueron increíbles por la acogida que se tuvo y donde la utilidad de esa fecha fue cercana a los mil soles de hoy. Esta construcción dio lugar también al cambio de salón de ensayos que antes era detrás de la Sacristía. Al construirse nuevos ambientes dentro del Salón Parroquial, nos turnábamos entre el Salón Grande, hoy “San Francisco Solano” y el Salón Chico que hoy es Velatorio y se llama “Señor de la Divina Misericordia”.

Con el correr de los años se fueron formando nuevos PPJJ en los cerros cercanos, como por ejemplo Flor de Amancaes y San Juan de Amancaes.
Y así Jumi, empezó a ampliar su campo de labor, no sólo pastoral, sino también misional y de labor social visitando también estos PPJJs. De allí nació la magnífica idea de hacer una chocolatada en navidad para los niños del lugar y es así que los casi 100 jóvenes que integraban el grupo, traían de sus casas, o pedían apoyo a sus padres o hermanos mayores para que sus empleadores colaboren con nuestra labor. Esto con el apoyo de personas de la zona que con mucho cariño, nos brindaban la ayuda necesaria para cumplir con nuestro cometido. Luego de algún tiempo, cambió la jurisdicción de la Parroquia y ya no podíamos trabajar con ellos pues pertenecían a otras parroquias. Pero como nuestra misión era estar al lado de los más necesitados, decidimos buscar lugares más pobres para ahí realizar nuestra labor social, especialmente la Chocolatada de Navidad. Algunas veces en Huaycán, en Independencia, otras en Zapallal y hasta en Pachacutec – Ventanilla.

También se apoyó con la Catequesis Parroquial y con toda actividad que realizaban los padres franciscanos que dirigían nuestra Parroquia; asimismo, debemos resaltar la labor de apoyo de las religiosas Hijas de Cristo Rey que nos asesoraban y nos apoyaban no sólo con su presencia sino también la práctica religiosa que era necesaria para jóvenes como nosotros, que llevaban en el pecho un escudo llamado CRISTO. No podemos dejar de mencionar especialmente a la Madre Teresa Rendón Botero, una colombiana muy alegre y locuaz que, nos daba ese impulso para seguir luchando por los demás y también nos enseñó a amarnos unos a otros. Justamente fue ella la que nos bautizó con el nombre de “Juventud Misionera”.

Nuestro grupo albergó jóvenes de toda condición social, raza e ideal y por ello, en algún momento se nos consideró rebeldes; pero estos rebeldes siempre defendieron causas justas y supieron editar una revista llamada “Jumi Liberación”. Organizaba actuaciones maratónicas para fechas especiales, como “Día de la Madre”, para nuestras visitas a los asilos, los aniversarios de la Parroquia e incluso para nuestra labor en Navidad. De todos los jóvenes que estuvieron en el grupo, han nacido sacerdotes y religiosas e incluso se han dado matrimonios (algunos que ya cumplieron hasta sus Bodas de Plata),

Asimismo, estamos orgullosos que de nuestras raíces nacieron y crecieron otros grupos como por ejemplo: Paz y Bien, el primer grupo Coral de la Parroquia (ACAPS) que se formó básicamente con integrantes de JUMI y que hasta hoy canta en la misa de las 11:30a.m. y el Grupo Getsemaní que trabajaba en la Parroquia de La Consolación.

Hoy en día ya no somos un grupo activo, pero aún se mantiene en nosotros ese espíritu de fe, de trabajo y amor hacia los demás y sobre todo de lucha contra la pobreza y contra la injusticia.

Sonia Casola


COMO HAN PASADO LOS AÑOS


Como han pasado los años
y solo Dios sabe porque
si te pones a pensar
me parece que fue ayer

Nació un 23 de Enero
y fueron 13 los que creyeron
que tanto tiempo iba a durar
una bonita amistad que termino
en una bella hermandad

Gran entusiasmo el que vivimos,
al llevar paz y alegría,
al asilo de Pizarro
y a los ancianos alegrar

Finalmente fue a Mariscal,
que llevamos chocolate,
panetón y juguetitos,
a celebrar la navidad
con toditos los chiquitos

Unos partieron primero,
otros quedamos atrás,
luego vinieron los nuevos,
sin poder hacer ya nada mas.

Pasaron año tras año,
y solo Dios sabe porque,
la Juventud Misionera ,el “J U M I”
se reunirá siempre, por siempre otra vez.

Francisco Chiu Uzategui